"Fast & Furious 5: Fast Five", de Justin Lin (por Loren)

Reseña de la quinta entrega de 'The Fast and the Furious', donde aparte de las caras conocidas de las saga, se incorpora a Dwayne Johnson (alias 'The Rock') en el reparto.

La saga de coches más famosa de la pantalla grande se compone ya de cinco películas. Hace ya la friolera de diez años desde que se estrenó la primera entrega, The Fast and the Furious (también llamada "A Todo Gas"), a la que un par de años después siguió 2 Fast 2 Furious, más carreras, más efectos especiales y más acción. Tres años más tarde aparece The Fast and the Furious: Tokyo Drift (o "Tokyo Race"), que supone un soplo de aire fresco a la saga por el cambio de la ambientación, trasladándonos de las costas estadounidenses a la capital japonesa. En 2009 se estrena Fast and Furious: Aún más rápido, en la onda de las dos primeras entregas, y donde vuelve a parecer Vin Diesel en el papel de Dominic Toretto, sin duda lo que los fans más acérrimos a este tipo de películas esperaban. Finalmente, Fast & Furious 5: Fast Five vuelve a la carga con algunos toques de frescura añadidos a la saga para que no sea todo una repetición de esquemas, aunque por supuesto no faltan los elementos que caracterizan a la franquicia.

En esta quinta entrega de la saga de los coches, que por cierto está ampliamente inspirada en la conocidísima marca de videojuegos Need for Speed, volvemos a ver a Vin Diesel en el papel de Dominic Toretto, a Paul Walker como Brian O'Conner, a Jordana Brewster como Mia Toretto, a Tyrese Gibson como Roman Pearce (2 Fast 2 Furious), a Matt Schulze como Vince, a Sung Kang como Han Lue (Tokyo Drift), y a Joaquim de Almeida (nuevo en el reparto) como Hernan Reyes, el capo de la mafia que desea enriquecerse a toda costa. Salvo el villano, todo son caras conocidas para los que han seguido estas películas desde sus inicios, formando una suerte de saga que es recomendable comenzar desde el principio para no perder las referencias. Además, contamos con la participación de Dwayne Johnson, alias "The Rock", uno de los héroes de acción del momento que ha tomado el relevo de otras estrellas del cine como Stallone o Schwarzenegger. Aquí interpreta a Luke Hobbs, un tenaz y forzudo policía que va en busca y captura del grupo protagonista. Por otra parte, cuenta con Elsa Pataky en un papel secundario y bastante anecdótico vistos los precedentes, este personaje sobraba.

Dentro de estas películas ya sabemos lo que nos vamos a encontrar: acción, chicas ligeras de ropa bailando a ritmo de reggaeton (bastante menos que otras veces, hay que decir), coches trucados, robos, explosiones y puñetazos. Debo decir que esta entrega me ha sorprendido más de lo que esperaba, pues la cinta tiene un toque a lo Ocean's Eleven, incluso The Italian Job (por el tema de los coches), que creo le sienta bastante bien, la hace diferente a las anteriores, la manera en que el grupo principal se reúne, que si bien no ocurre como en la película protagonizada por Pitt y Clooney (uno a uno, en plan personalizado), sí que se incide en sus diferentes habilidades, aunque no se aprovecha del todo este factor. El caso más evidente se da en el personaje de Han Lue, que ya en la tercera película (Tokyo Drift) se le consideraba un maestro en el manejo de los coches por circuito cerrado, cosa que se puede esperar perfectamente en esta quinta película, el aprovechamiento de ese potencial para algún tipo de robo, cosa que al final no es así, dejando al personaje desaprovechado y convirtiéndolo más bien en un cameo largo.

Estamos hablando de una cinta de acción que se centra en los coches tuneados, de colores brillantes y maniobras en absoluto permitidas, por lo que a los que no gusten de este tipo de películas que se vayan olvidando de verla. Sin embargo, los detalles que han introducido en esta nueva entrega, como el hecho de que esté ambientada en Rio de Janeiro, la inclusión de "The Rock" como el polícia tenaz persecutor, la incidencia en el tema del compañerismo y la amistad (los "buenos momentos"), le da algo de profundidad a la franquicia que antes no tenía. Por supuesto, se trata de una película palomitera, con personajes sencillos pero efectivos, explosiones, tiros, etc. Es muy posible que esta entrega cuente con un presupuesto mayor a tenor de lo visto durante su visionado, porque su secuencia final cuenta con una de las persecuciones más brutales que se han podido ver en una película de acción (ni siquiera Death Race, 60 Segundos, Ronin o Jungla de Cristal 4.0), y donde todo lo rodado es prácticamente real (por no decir todo), al contrario de lo que sucede en algunas carreras de las anteriores películas (hecho que las desvirtúan en cierto modo). Si os gustaron las anteriores entregas, no dejéis pasar esta porque de seguro os gustará también. Si por el contrario no os gusta ninguna de ellas podéis darle una oportunidad igualmente por los detalles antes mencionados, aunque no deja de ser un "The Fast and the Furious", para lo bueno y lo malo. Dirige la cinta el taiwanés Justin Lin, director de las tres últimas cintas de la serie. ¡No olvidéis quedaros al final de los créditos!

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Ventajas:
-Ciertos detalles que la diferencias de sus predecesoras (salvo Tokyo Drift).
-La pelea entre "The Rock" y Vin Diesel, dos musculitos dándose de tortas y arramblando con todo.
-La persecución final, una de las más brutales que se han podido ver en una cinta de acción.

Desventajas:

-Que no te gusten las películas de "The Fast and the Furious".
-La inclusión de Elsa Pataky en el reparto, una de las actrices españolas más oídas del momento, totalmente prescindible.
-Las habilidades de algunos de los personajes principales no están aprovechadas en el conjunto de la trama.

por Loren Sparrow junio 23, 2011